Dracula's Daughter
La Hija de Drácula
LA CONTINUACIÓN DE DRÁCULA
En esta ocasión la protagonista, el vampiro de esta película de Lambert Hillyer, es una mujer. Los actores que intervienen en el metraje no son estrellas de primera categoría pese a que el presupuesto hubiera permitido contratar un elenco de mayor caché.
Bela Lugosi, a quien se pagó 4000 dólares intervino en algunas escenas que luego fueron desechadas. La razón es que las asociaciones de padres de familia norteamericanas, preocupadas por el éxito que vivía en aquellos momentos el cine de terror, presionaron a la industria para limitar su influencia.
La productora se vio obligada a suavizar algunas escenas eliminando aspectos terroríficos de las mismas y a prescindir de algunos autores asociados al cine de terror. Una continuación de esta saga vino después con Son of Dracula, de 1943.
La película recibió muy buenas críticas. Se trata de una cinta novedosa en muchos aspectos además del hecho de presentar a un vampiro femenino como protagonista, e incluso se insinúa veladamente ciertas inclinaciones lésbicas muy comunes en las vampiras de cine y literatura, al más puro estilo de la Carmilla de Le Fanu. Pero en esta ocasión el vampiro odia su condición. La condesa siente una mórbida fascinación por la sangre que al mismo tiempo la turba y la repugna, razón por la cual intenta recurrir a la ayuda de un psiquiatra cuando le oye decir que hay cura para ciertas obsesiones. Como curiosidad se suele comentar que Gloria Holden (la condesa), sólo pestañea una vez en toda la película.
SINOPSIS
La película continúa donde lo dejó el Drácula de Browning. Dos policías encuentran en la abadía de Carfax el cadáver de un hombre con el cuello roto (Renfield), y otro atravesado por una estaca (Drácula). Allí encuentran también a Von Helsing quien les cuenta que ha dado muerte a un vampiro, pero no le creen y es detenido bajo la acusación de asesinar a un noble extranjero. Para evitar la horca Von Helsing pide ayuda a Jeffrey Garth, célebre psiquiatra que fue alumno suyo. En Londres se encuentra en ese momento la condesa Mary Zaleska, aristócrata húngara, hija del conde Drácula como confesará más adelante. La condesa ha heredado la maldición de su padre pero ansía llevar una vida normal y le repugna su condición que la obliga a dormir en un atáud, a evitar los espejos y la luz del Sol, y a matar para beber sangre.
En un intento por deshacerse de la maldición hipnotiza con su anillo a uno de los policías que vigila el cuerpo de su padre, roba el cadáver y lleva a cabo un ritual de exorcismo tras el cual incinera el cadáver del conde: "Y a Adonai y a Azrael, al cuidado de los señores de las llamas y los abismos más profundos, relego este cuerpo a consumirse eternamente en este fuego purificador; que todos los funestos espíritus que amenazan las almas de la gente queden desterrados cuando se les espolvoree con esta sal. Recibid el exorcismo, oh Drácula, y que vuestro cuerpo, largamente vivo, quede destruido para la eternidad en nombre de vuestro oscuro e impuro señor. En nombre de lo más sagrado y mediante esta cruz, que el espíritu maligno desaparezca hasta el fin de los tiempos”.
La condesa lucha entre su condición de depredadora y la repulsa que ello le causa; pero pese a sus esperanzas quemar el cuerpo de su padre no le ha quitado su sed de sangre. Algunos cadáveres desangrados empiezan a aparecer en Londres. La condesa se vale de su anillo y su poder hipnótico para dejar inermes a sus víctimas. En una fiesta conoce al psiquiatra, Jeffrey Garth, y trata de obtener su ayuda. Aunque no le cuenta realmente lo que la pasa el psiquiatra la sugiere que luche contra aquello que la turba enfrentándose al objeto que produce su ansiedad. Con esa idea envía a su criado, Sandor, para que busque una muchacha que pueda servirle de modelo. Sandor encuentra a una muchacha llamada Lili y consigue convencerla para que la acompañe. La condesa trata de luchar contra su impulso, pero al ver la piel de la joven sucumbe al deseo de hipnotizarla y beber su sangre. Lili es encontrada después en estado de coma y llevada al hospital donde el doctor Garth la hipnotiza poco antes de que muera. La ausencia de espejos en la casa de la condesa y las declaraciones de la muchacha en estado de hipnosisi le hacen sospechar.
La condesa se presenta en el sanatorio y secuestra a la asistente del doctor. Acto seguido huye hacia su castillo en Transilvania. Van Helsing y el doctor Garth acuden a rescatar a la chica. Garth viaja hasta el castillo y encuentra a la condesa, quien le ofrece la vida de la muchacha a cambio de la suya. Su deseo es convertirle en un no muerto para que comparta con ella la eternidad. Sandor, a quien la condesa había prometido la vida eterna, celoso, acaba con ella disparándola una flecha de madera con una ballesta. La vampira, que según declara Van Helsing llevaba cien años muerta, muere así al serle atravesado el corazón. Sandor muere de un disparo de la policía en el momento en el que iba a lanzar otra flecha sobre Garth.
FICHA TÉCNICA
- Título: Dracula's Daughter.
- Título en castellano: La Hija de Drácula.
- Director: Lambert Hillyer.
- Guión: David O. Selznick.
- Año: 1936
- País: USA.
- Idioma: Inglés.
- Formato: blanco y negro.
- Duración: 71 minutos.
- Compañía: Universal Pictures
- Reparto: Otto Kruger (Jeffrey Garth); Gloria Holden (Marya Zaleska); Marguerite Churchill (Janet); Edward Van Sloan (Prof. Von Helsing); Gilbert Emery (Sir Basil Humphrey); Irving Pichel (Sandor); Halliwell Hobbes (Hawkins); Billy Bevan (Albert); Nan Grey (Lili); Hedda Hopper (Lady Esme Hammond); Claud Allister (Sir Aubrey); Edgar Norton (Hobbs); E.E. Clive (Sargento Wilkes).
© 2008. Javier Arries